Especifiquemos las 4 partes de un examen práctico para que no se te escape nada ese día tan importante en el que te puedes convertir en conductor oficialmente.

Es importante que conozcas al detalle las 4 partes de un examen práctico para que llegues a tu prueba con todos los conocimientos que necesitas para superarla con éxito. ¡Empezamos!

Primera parte: comprobaciones previas

Después de comprobar tu identidad y documentación, comienza tu prueba de conducción y circulación o haciéndote una pregunta, o proponiéndote que realices alguna acción para comprobar tus conocimientos básicos sobre:

  • Acomodación
    Cómo se coloca el reposacabezas en este vehículo, accione el dispositivo para regular en altura o profundidad el volante, baje el parasol para evitar el deslumbramiento…
  • Mantenimiento o seguridad del vehículo
    Abra el capó, cómo se comprueba el nivel del aceite en el motor, dónde está el vaso de expansión, cómo comprueba la profundidad del dibujo de las ruedas…
  • Instrumentación
    Dígame cuál es el testigo del freno de mano, dónde miramos la temperatura del líquido refrigerante, cómo se conecta la luneta térmica, toque el claxon…
  • Documentación
    Muéstreme el permiso de circulación, dígame cuándo tiene que pasar la siguiente inspección técnica este vehículo, hasta cuando es válido el seguro de este coche…

Te pueden hacer otras preguntas, estas anteriores son sólo un ejemplo de las muchas que te pueden hacer.

Segunda parte: conducción autónoma

Consiste en conducir 10 minutos sin que te dirija el examinador y se puede realizar de las siguientes maneras:

  • Circule usted libremente.
  • Vaya usted donde quiera (sigues siempre en línea recta y cuando puedas giras alguna vez a la derecha o a la izquierda, y enseguida el examinador pasa a dirigirte).
  • Vaya usted a Móstoles y después a Alcorcón (una dirección que puedas leer en los carteles). Es la más habitual, sobre todo en grandes ciudades.
  • Ir a algún lugar que sea conocido por el alumno. Por ejemplo: vaya usted al Carrefour. Tú le dices si sabes ir o no, y si es que no te dirá otro sitio hasta que conozcas alguno al que dirigirte.

Tercera parte: conducción dirigida

El examinador o examinadora te da órdenes concretas, como: cambie la dirección, cuando pueda a la derecha o a la izquierda, cambie el sentido de la marcha, busque un lugar para estacionar…

Ahora tienes que demostrar todas tus cualidades, porque es cuando se te va a proponer hacer más tareas.

Es aquí cuando los alumnos cometen más faltas, como olvidar algún intermitente, no observar alguna vez los retrovisores, calar el motor, no cambiar las marchas en el momento oportuno, no mantener las separaciones adecuadas, incumplir un stop o ceda el paso, un paso para peatones…

Cuarta parte: conducción eficiente

Esta parte transcurre durante toda la prueba, y se intenta comprobar que sabes conducir intentando no contaminar y ahorrar combustible.

Debes realizar alguna técnica que cumpla ese objetivo, por ejemplo: cambiar las marchas dando saltos (cambiar a otra marcha más alta o más baja, pero no la siguiente) ni dando acelerones innecesarios, circular por inercia y otras muchas que te explicarán en tus clases prácticas y que puedes ver en nuestros tutoriales.

Las faltas

  • Cuando fallas en la pregunta de comprobaciones previas te van a poner una falta leve.
  • Si lo haces en la conducción autónoma, y en general si no sigues las indicaciones del examinador una vez, te pondrán una falta leve, si no sigues dos veces las indicaciones te pondrán dos faltas leves, pero si no sigues las indicaciones tres veces, es falta eliminatoria ¡cuidado!
  • En la conducción dirigida las faltas pueden ser leves, deficientes o eliminatorias, depende del fallo concreto que se haya cometido.
  • En la conducción eficiente te pueden poner una falta leve si no realizas alguna vez alguna técnica.

Espero que te hayan quedado claras las 4 partes de un examen práctico, y te aconsejo o dejes de ver los tutoriales y profundices un poco más en este tema.

Te deseo un buen día.
Hasta pronto y ¡ánimo!